De vuelta a casa
Hoy comenzaré a desandar el camino andado. Esta noche cogeré el tren nocturno que me llevará de regreso a Helsinki. Luego Ámsterdam, Barcelona y la isla.
Volver es casi lo mejor de marcharse...Traigo imágenes, olores y tactos nuevos que han conseguido reducir un poco más el agujero del vacío que todos llevamos dentro…compartirlo ha servido de mucho. Gracias a los que se mostraron y a los que quedaron detrás. Un beso. Nos vemos pronto.

Queridos Alejandro, David y primitos que vienen en camino:

Después de un largo viaje vuestra tía ha venido a visitarme para darme en persona vuestra carta. Yo me he quedado muy contento porque no suelo recibir cartas de niños españoles. Mis grandes amigos los Reyes Magos suelen viajar más por esas latitudes pero no dudéis que hablaré con ellos personalmente y les contaré lo bien que os habéis portado este año…un abrazo muy fuerte de vuestro amigo

Papá Noel.

Levi
Hoy era mi último día aquí. Me desperté muy temprano y al subir las persianas he descubierto que había nevado. Y mucho. Todo estaba cubierto de blanco, tanto, que incluso temí no poder seguir las indicaciones del plano hasta la parada del bus para Rovaniemi…Es una bonita despedida de Laponia. Durante mis noches aquí me he levantado varias veces para ver si había suerte y veía la aurora boreal, pero está todo muy cubierto…
En la parada, grupo de erasmus en Finlandia. Entre ellos dos españoles.
Ya en Rovaniemi la nieve me sigue, pero a ratos. Voy a uno de los principales museos nacionales, el Arktikum, donde hacen un exhaustivo recorrido por toda la historia, flora y fauna de Laponia. Para llegar bordeo el río por un camino nevado…y de vuelta al hotel. Mañana tengo que hacer unos cuantos recados a mis sobrinos….

Círculo Polar Ártico
He llegado a Rovaniemi.En el mismo circulo polar ártico.Donde vive Santa Claus.Donde se encontraron Ana y Otto.He dejado el coche y justo en la puerta de al lado habia un garito que se llamaba Doris.Otra casualidad de la vida.
Me fui a la estacion de autobuses y cogí el primero que salía a Levi.Estación de montaña muy popular en Finlandia y que se encuentra en el mismo centro de la Laponia finesa.El conductor se parecía a San Segundo, el santo de los encuentros y desencuentros...
Desde la carretera se divisa un camino que va perdiendo color. Disminuyen los pinos y va dejando paso a la tundra y por fin a los renos.Se cruzan díscolamente.Al fin y al cabo el territorio es antes suyo que nuestro. A lo lejos se comienza a divisar la colina que alberga la famosa estación de esquí.Hay nieve en la cumbre que se extiende lamiendo sus pendientes....Vamos quedando menos en el bus, hasta que otro nativo y yo bajamos en la ultima parada...por fin la montaña.Ya casi ha oscurecido.

Kuopio
Ya terminé mi estancia en la cabaña y continúo rumbo a la Laponia. Ahora Kuopio, la ciudad de Marina. Aquí está la sauna más grande del mundo, alberga a unas sesenta personas. Yo sigo sin probarla.
Después de una laberíntica entrada al centro de la ciudad, elijo un hotel y deambulo por sus calles. Hoy hace un día radiante. Sin una sola nube, pero hace frío. Me temo que acabaré comprándome un horrible jersey de renos de colores con gorro a juego.
El kauppatori (mercado) ya ha recogido sus puestos. En todas las ciudades por las que he pasado hay uno de ellos de donde convergen las principales arterias de la ciudad. Éste se encuentra justo enfrente del edificio del Ayuntamiento, a los alrededores restaurantes de comida rápida y centros comerciales. Aunque parezca muy urbano, no da esa sensación porque los edificios son bajos y encuentras árboles a cada paso, algún lago y centenares de bicicletas por todas partes.
Elijo para tomar el postre una cafetería recomendada en la guía. Muy moderna, con cuadros abstractos y con música clásica de fondo. Me tomo un capuchino y una tarta de zanahorias deliciosa mientras hago repaso del camino andado….Luego en un pub continúo pensando en el camino que queda por recorrer. Aún me quedan dos días más de carretera hacia el norte. El hombre del tiempo ya vaticina las primeras nevadas y yo me mantengo a escasos grados sobre cero. Acabaré comprándome el jersey….ja, ja.

Carelia, Región de los Lagos
La cabaña se encuentra a unos quince kilómetros de Savonlinna, ciudad donde se celebra un renombrado Festival de Ópera en verano y posee el castillo medieval mejor conservado de Escandinavia.
Me ha despertado la lluvia sobre el tejado y me ha acompañado durante el día. Muy fina y tímida que se esconde por momentos. He ido a la ciudad a por provisiones y he visto el castillo. Está toda la ciudad desierta…Me entretengo con un capuccino a media mañana para dejar de temblar. El reloj de enfrente marca cinco grados.
En la cabaña, he recibido la visita de la dueña por si everything ok? Sí, le digo y le pregunto si hay osos. Anoche no se me ocurrió ver otra cosa que un documental sobre ellos. No, bears no. Renos, eso sí. Y me siento a mirar por la ventana, cámara en mano, por si me quieren hacer una visita…Antes afino con los dardos… Mañana utilizaré la sauna, pero hoy me quedo recogida en el sofá bajo mi manta de iberia, viendo una película finesa en blanco y negro y cuando se tercie encenderé el fuego.

Kataja

Ésta es la palabra que utilizan los fineses para la cabaña. Esto es impresionante. Mientras la dueña me explica cómo funciona la chimenea y la sauna, yo me limito a sonreír de oreja a oreja, y no porque no me entere sino porque finalmente estoy aquí.
Hay niebla y no luce el sol. Sólo se oyen los pájaros y el ruido de las copas de los árboles mecidos por el viento. Me acomodo, distribuyo mis cosas y preparo un chocolate caliente. Me lo tomo en el porche. Tengo cinco días por delante para descansar de todo.

En ruta

Hoy es un día de tránsito. Recojo el coche y comienzo el camino que me llevará hasta la cabaña. Cuatrocientos kilómetros por delante y una noche de improvisación en medio. Lo poco al azar que he dejado en este viaje.
Por el camino, recuerdos de muchos aniversarios en este día.

Isla de Suomenlinna

Se trata de una fortaleza construida en una isla a un cuarto de hora de Helsinki. La construyeron los suecos, cuando Finlandia era aún de ellos, para defenderse de los rusos.
La isla en realidad son cuatro islotes unidos por pequeños puentes. Recorrerla entera puede llevar unas cuatro horas sin parar. Es octubre y se nota. Apenas hay gente. Muchos cafés están cerrados y la pequeña cala está vacía. Luce un sol radiante pero deben rondar los quince grados…Es patrimonio de la Unesco y se trata del único monumento militar que ellos protegen por lo que se mantiene todo como era, a pesar que hay residentes en la isla, un colegio, un centro de salud y hasta una escuela de arte…..Las callejuelas están adoquinadas. Sólo transitan coches de los obreros que trabajan en algunas labores de restauración por lo que el silencio es infinito. Recuerdas que allí se lucharon múltiples batallas tras encontrar en las costas cañones enfilando a alta mar….
Por todas partes hay bancos para que te pares a contemplar, a mirar, a pensar….y lo curioso es que la gente lo hace. Se sienta sin hacer nada, o saca un libro, o se ponen a escribir, o unos prismáticos para observar las aves…. y yo les imito.

HELSINKI

Ciudad pesquera. Salida de un episodio de “Doctor en Alaska”.Se oyen las gaviotas que me acompañan hasta el hotel, en el mismo muelle. Antes, el mercado callejero de comida. Pescado, verdura y fruta. Me hace gracia el de la pescadería, abriendo un pescado y vestido con un gran jersey de lana y gorro a juego. Hace frío pero el cielo está despejado. La brisa del mar te hiela las entrañas. Se ve difuminado…
Otra Catedral, impresionante. Esta vez sin velas, no las veo por ningún lado…Luego plaza del Senado, otra iglesia, estación de trenes….estoy buscando un museo donde está “El Pensador” de Rodin. No lo encuentro y ya voy por la cuarta comprobación en la misma calle. Me rindo. Si él no se deja ver, yo tampoco.
El resto regular. No me parece bonito, aunque comparado con Estocolmo me parece más real. La gente viste más normal y es menos guapa.
A dos metros sobre tu cabeza se enredan los cables del tranvía, me recuerdan al juego del hilito…
Busco algo que hacer, me embalsamo dentro de la bufanda y camino por las avenidas del centro. Busco un sitio bonito para tomar café o mejor un chocolate caliente, pero está lleno de centros comerciales….me conformo con uno rápido en un “super” y me lo tomo en mi superhotel. Oyendo música, coldplay. Los traje conmigo.

Hacia Finlandia

Escribo desde la cubierta del barco. Puede parecer algo snob, pero aquí usan un portátil tanto como el móvil, así que paso desapercibida. De todos modos ando sola en la cubierta y eso que el barco va lleno. Imagino que están calentándose el cuerpo. Está lleno de bares y hay hasta un casino. Sin embargo no hay un salón para la tele o leer. Sólo quieren que consumas.
El barco acaba de zarpar. Me quedan casi quince horas por delante. Comparto el camarote con una madre e hija colombiana. Creo que a la madre le parezco poco de fiar porque no le gustó mucho lo de que viajara sola.
Hoy he visto Estocolmo desde el mar, en un pequeño barco. Bordeaba el parque en el que estuve ayer. Después visita a la catedral con velita para mi abuela incluida (lo suelo hacer cuando viajo, en iglesias nuevas) y por último el barrio de Sodermaln. Lo llaman el barrio bohemio, a mi me pareció el normal, con gente corriente, trabajadora….
Todavía no me creo que vaya a llegar a Finlandia....

DJURGARDEN

He estado en una isla que solo es un parque y en un parque que solo es una isla. Fue lo primero, antes y durante el recorrido. En bicicleta. De esas del manillar muy alto y que frenan pedaleando hacia atrás. Por senderos. Rodeados de árboles. Con toda la gama cromática del amarillo al marrón. Bordeando el mar, atravesando bosques, campos de espigas. Huele a sano. A real. A verdad.
El parque se quedó en sólo una isla a la vuelta, cuando recuerdas lo tuyo, que hay más islas y más verdades…… pero hoy me quedo con ésta.

Estocolmo

Ayer llegué a Estocolmo en un periplo que se alargó hasta 12 horas, al parecer cerca del aeropuerto de Ámsterdam encontraron una bomba de la segunda guerra mundial y tuvieron que cancelar varios vuelos que tendrían que volar por la zona. Yo al final dudé de si se trataba de una estrategia de la compañía área para que los viajeros no se quejaran mucho, pero reconozco que sería una excusa rebuscada y demasiado romántica…….de la segunda guerra mundial…..
La habitación del hotel me recuerda LOST IN TRANSLATION. No se ven rascacielos, pero casi toda la pared que da afuera la ocupa una enorme ventana de lado a lado. Se ve el mar. En realidad se trata de un lago que se mezcla a la salida con el mar báltico. Sentada sobre una de las camas, al lado de la ventana me quedo a la altura del agua. Parece que puedo saltar desde la misma y zambullirme de cabeza. A lo lejos veo el ferry que me llevará dentro de dos días a Helsinki.
Hoy, mientras almorzaba, he conocido a una señora. De aquí. Había estado dieciocho veces en Gran Canaria, quince en Tenerife, una vez en La Palma, una en Lanzarote y otra en Fuerteventura. Le quedaba El Hierro. Al principio pensé que me estaba tomando el pelo, pero cuando comenzó a hablar de Artenara y de La Aldea, me tuve que quedar a tomar el té. Casualidades de la vida.
He estado caminando. No he entrado a ningún lugar público. Solo a una iglesia. Estaban tocando el órgano. Para ser no creyente, atea o agnóstica, aún no me defino, me encantan estos sitios, cómo huelen y la tranquilidad que transmiten. ¿así será el cielo para ellos? Hoy casi no he pensado. Lo dejaré para más adelante. Me he dejado llevar. Aquí es otoño. Huele a árboles, y son de oro marchito. Los suelos están alfombrados por las hojas…es muy hermoso, tanto, que dan ganas de llorar.

Este viaje comenzó en el año 98, mientras veía la ultima peli de Medem, "Los amantes del círculo polar". Influenciada por ANNA y OTTO me dejé seducir por esta tierra, tan cerca y tan desconocida, comparada con otros lugares más lejanos. Fría, hermosa y misteriosa.
Año 2005. Después de visitar otros sueños prioritarios, me toca Suomi, Finlandia para nosotros. Sigo sin entender por qué traducen los nombres originales...18 días, comenzando el viaje por Estocolmo, para llegar a Helsinki por el Báltico.Desde el Sur hasta el Norte, pasando por Kuopio, Kajaani, Oulu, Rovaniemi y hasta Levi, en la misma Laponia.
Este es mi segundo viaje sola y la otra vez me quedé con las ganas de compartir cosas con los míos, así que ésto será como viajar todos juntos....un beso y nos vemos en Suomi.